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sábado, 3 de mayo de 2008

Dos solitarios

Como todas las noches entró al estudio de la radio con la alegría de poder disfrutar junto a sus oyentes de una maravillosa velada con buenos recuerdos y buena música.
Se sentó en su silla reclinable, acomodó sus papeles y le hizo una seña al operador para que sacara el primer tema al aire, y el primer tema comenzó a sonar.
Al principio no le prestó atención, parecía uno más de los tantos temas que había programado para esa noche. Uno más entre un montón, uno más, solo uno más.
¿Uno más?
La frase lo distrajo por un momento. “Dos solitarios en este mundo… cansados de la búsqueda de amar”. La había escuchado miles de veces pero nunca se había puesto a pensar en su significado, nunca había caído en la cuenta de cuanto tenía que ver con lo que le estaba pasando a su vida. El también se sentía “cansado de la búsqueda de amar”, tal cual se lo repetía la canción, como queriendo que reparara en algo que él no sabía o no quería descubrir.
“Dos solitarios, que en este mundo, cansados de la búsqueda de amar… detienen un instante, confiesan su amargura y buscan esquivar la realidad”. Ahora la canción golpeaba más fuerte, con más intensidad. Calando muy hondo en su alma, su alma dormida al amor desde hacía mucho tiempo.
Le hizo una seña al operador para que subiera el retorno del sonido al estudio.
“Dos solitarios somos mi amiga…no creas encontrar en mí el amor”. ¿Era tan así? O era él quien se empeñaba en alejar de su vida todo lo que le recordara que alguna vez había entregado su corazón, sin pensarlo, sin medir las consecuencias de amar y sentirse amado. “Refugia tu desdicha y cuéntame tus penas… ahoga en esta noche tu dolor”. ¿Y si la llamaba? ¿Si le confesaba lo que sentía cuando ella sonreía, cuando ella lo miraba? ¿Si le decía que lo intentaran, que estaba dispuesto… que quería volver a amar?
“Ven la magia ya comienza… ven vivamos la ilusión, ven la noche nos acerca… ¿ves? se duerme ya el dolor”.
Se incorporó de golpe en su silla y confundido le hizo una seña al operador para que quitara el retorno del tema al estudio. No lo pensó demasiado, le salió así, visceral, como le salían, desde hacía mucho tiempo, muchas cosas en su vida.
Tenía miedo, sentía angustia. No quería volver a amar. No quería volver a sufrir.
“Se apagan ya las luces y colores, la orquesta se ha marchado del lugar… despiertan otra vez viejos dolores, el mundo ya otra vez se echo a rodar…”

jueves, 1 de mayo de 2008

EL DIA DEL TRABAJADOR,
el día de mi viejo.

Hoy es el día del trabajador. Eso ya lo sabés, y seguramente también sabés porqué se festeja en esta fecha. Teniendo en cuenta esto Carlín no te va a dar cháchara con lo mismo.
Además como este blog es reflejo de mi corazón y mi corazón es reflejo de mi vida, hoy, en este día quiero recordar a quien me enseñó a amar el trabajo. A quien me enseñó que el trabajo es dignificante, a quien trabajó desde muy chiquito vendiendo diarios en su pueblo natal Patricios. A quien trabajo toda su vida, a veces con suerte, a veces con no tanta suerte, pero siempre con responsabilidad, con esfuerzo, con compromiso, para darle a su familia el bienestar que el necesitaba sentir que les estaba dando.
Fue "canillita", fue cadete, fue tejedor, fue dueño... fue fletero. Fue mi viejo, mi querido viejo.
Fue todo lo que la vida le dejó ser y trabajó hasta muy grande, desde la madrugada hasta muy entrada la noche. Hasta que un día no pudo hacerlo más y ese día comenzó a envejecer.
Por cada año de inactividad envejeció cinco. Claro, el había nacido para trabajar, y dejar de hacerlo era muy difícil. Tan difícil como dejar de amar a los que lo amábamos, aunque a veces no se lo demostráramos como él lo merecía. Quizás porque así lo aprendimos desde pequeños, cuando las relaciones entre padres e hijos eran más distantes de lo que son hoy.

Por todo eso, hoy que mi viejo, inquieto como siempre, debe estar en el cielo dando vuelta los escarabajos en los parques del paraíso lo recuerdo con el amor que él siempre nos enseño a dar. Mi viejo el mejor ejemplo de la dignidad del trabajo, sobre todo hoy que tanto se manosea este término.

Viejo querido te regalo, te regalamos con Li y Goro, mis hermanos, a vos especialmente y a todos lo trabajadores del mundo este tema que tanto te gustaba y que seguramente escucharás en tu corazón allí donde estás mirándonos y cuidándonos como siempre.

Piero – Mi Viejo
Carlín

HOMENAJE A LOS ANIMALES (Nó... esos nó, los que caminan en cuatro patas)

Un hombre, su caballo y su perro iban por una carretera. Cuando pasaban cerca de un árbol enorme cayó un rayo y los tres murieron fulminados.

Pero el hombre no se dio cuenta de que ya había abandonado este mundo, y prosiguió su camino con sus dos animales (a veces los muertos tardan un cierto tiempo antes de ser conscientes de su nueva condición...)

La carretera era muy larga y colina arriba. El sol era muy intenso, y ellos estaban sudados y sedientos. En una curva del camino vieron un magnifico portal de mármol, que conducía a una plaza pavimentada con adoquines de oro.

El caminante se dirigió al hombre que custodiaba la entrada y entabló con él, el siguiente diálogo:

- Buenos días.
- Buenos días - Respondió el guardián.
- ¿Cómo se llama este lugar tan bonito?
- Esto es el Cielo.
- ¡Qué bien que hayamos llegado al Cielo, porque estamos sedientos!
- Usted puede entrar y beber tanta agua como quiera. Y el guardián señaló la fuente.
- Pero mi caballo y mi perro también tienen sed...
- Lo siento mucho - Dijo el guardián- pero aquí no se permite la entrada a los animales.

El hombre se levantó con gran disgusto, puesto que tenía muchísima sed, pero no pensaba beber solo.
Dio las gracias al guardián y siguió adelante.

Después de caminar un buen rato cuesta arriba, ya exhaustos los tres, llegaron a otro sitio, cuya entrada estaba marcada por una puerta vieja que daba a un camino de tierra rodeado de árboles. A la sombra de uno de los árboles había un hombre echado, con la cabeza cubierta por un sombrero. Posiblemente dormía.

- Buenos días - dijo el caminante. El hombre respondió con un gesto de la cabeza.
- Tenemos mucha sed, mi caballo, mi perro y yo
- Hay una fuente entre aquellas rocas - dijo el hombre, indicando el lugar.
- Podéis beber toda el agua como queráis. El hombre, el caballo y el perro fueron a la fuente y calmaron su sed. El caminante volvió atrás para dar las gracias al hombre.
- Podéis volver siempre que queráis - Le respondió éste.
- A propósito ¿Cómo se llama este lugar?- preguntó el hombre.
- CIELO.
- ¿El Cielo? ¿Sí? Pero si el guardián del portal de mármol me ha dicho que aquello era el Cielo!
- Aquello no era el Cielo. Era el Infierno - contestó el guardián. El caminante quedó perplejo.
- ¡Deberíais prohibir que utilicen vuestro nombre! ¡Esta información falsa debe provocar grandes confusiones! - advirtió el hombre.
- ¡De ninguna manera!-increpó el hombre - En realidad, nos hacen un gran favor, porque allí se quedan todos los que son capaces de abandonar a sus mejores amigos...

(Paulo Coelho)

CASABLANCA

Seguimos con nuestra sección UNA DE PELíCULA, y para hoy te elegimos un clásico de clásicos...
CASABLANCA
Año: 1942
Filmada en Blanco y Negro
Duracion: 98 minutos en Blanco y negro
Direccion: Michael Curtiz

Actores principales:
Humphrey Bogart como Rick Blaine
Ingrid Berman como Ilza Laszlo
La trama era mas o menos asi:
La época: la Segunda Guerra mundial. El lugar: Casablanca, una ciudad de fácil acceso pero casi imposible de abandonar, especialmente si tu nombre se encuentra en la lista de los hombres mas perseguidos por los nazis. El principal objetivo de los invasores es el líder checo y héroe de la resistencia Victor Laszlo, cuya única esperanza es Rick Blaine, el propietario del Ricks Café, un hombre que no arriesga su vida por nadie... excepto por Ilsa. Ambos encarnan a unos antiguos amantes que vuelven a unirse brevemente en el caos de la guerra. Cuando Ilsa se ofrece a cambio de un visado que consiga sacar a Laszlo del pais, Rick debera elegir entre su propia felicidad o el idealismo y las numerosas vidas que podrán salvarse.
Ganadora de tres Oscars de la Academia, incluyendo el de Mejor Película, Casablanca es una joya cinematográfica cuyo valor crece a medida que pasa el tiempo.
De la banda de sonido del film Casablanca
Te ofrecemos un pedacito de la peli donde suena el tema de amor de Ilsa y Ricks ... sí... el que tocaba el morocho SAM en el piano...
( el que la cantaba en la peli en realidad era Dooley Wilson) ... de 1942 ...”El tiempo pasara